En estos momentos debería estar tocado, frustrado, decepcionado y un poco hundido. Pues no va a caer esa breba. Ahora mismo le hago un bailecito a todos aquellos que piensan que cada día me equivoco más y que piensan una y otra vez que su visión de la vida es mejor que otra. Tengo suficiente autoestima para repartir como para que piensen que me voy a quedar donde estoy aún sabiendo lo que me espera. Pongamos las cartas sobre la mesa. Evolucionemos de una vez, hay miles de opciones a elegir. No siempre escogeré lo correcto, y aún escogiendolo, quizás tampoco sea lo mejor, pero tened por seguro que iré con la cabeza bien alta. ¡Os la dedico granujas!
Créeme, lo intento. Pero no puedo seguir con esto eternamente. Me tienen enganchado, a veces tengo síndrome de abstinencia, y no puedo remediar chutarmelos de nuevo. Sé que lo hago pocas veces, pero me gusta tanto cuando lo hago, que me olvido de todos los demás. Quiero compartir mi droga, pero para ellos no representa nada. ¿Sólo soy yo el que está perdido? No quiero dejarlos a un lado pero tampoco veo esa chispa que antes tenían. A veces me siento engañado y pienso que estoy inmerso en una obra de teatro y que ellos representan su papel. Sólo yo me salto el guión e improviso. Sólo así puedo sentirme bien. No sé si hago lo correcto o si me estoy equivocando, el tiempo lo dirá. Lo que sí estoy seguro es que me sentiré orgulloso de haberlo intentado, porque así, quizás, me de cuenta de quien soy en realidad.
- ¿Y por qué tienes tanto empeño? ¿Acaso no es mio?
- Sólo te lo digo porque soy tu amigo. No es típico tenerlo tan largo. Sería más fácil echarte novia.
- ¿Otra vez el mismo tema?
- No sé, es mi opinión.
- ¿ Y si no quiero novia? ¿Y si mi prototipo de mujer es aquella a la que no le asuste como tenga el pelo o incluso le guste que lo tenga así?
- Tranquilo tío. Sólo te digo esto por tu bien.
- Estoy un poco harto de lo mismo. La gente cuestiona la vida de los demás sin apenas conocer a las personas. Que tenga el pelo largo o que me gusten otras cosas distintas no significa que sea mejor o peor persona, ¿entiendes?
- Sí, pero el físico, quieras que no, ayuda.
- Respeto tu opinión. Pero también sabes que la gente está llena de prejuicios. Y si comparto mi vida con otra persona, entenderás que no puedo aceptar eso.
- Tranquilo machote. No te piques. Venga, sólo es una tontería.
- Me canso de que repitas estas conversaciones una y otra vez. Sólo quiero beberme una cerveza tranquilo y siempre saltas con lo mismo.
- Ya está, tranquilo.
- Puede que sea diferente, pero al igual que yo, me tienes que respetar. ¿Alguna vez te he dicho algo de tu aspecto?
- No, pero...
- Ni peros ni manzanas. Bébete la cerveza y déjate de mierdas, que no tengo ganas de discutir hoy.
Con cosas así da gusto sentirse vivo. Puede que a lo mejor sea mi vocación y pensareis que soy extraño. Pues no lleváis ninguna razón y la tenéis toda a la vez. La culpa de todo la tiene mi mente neurótica forjada a patadas por todo lo intrínseco y extrínseco a mi persona. Puede que mi comportamiento no sea el de una personal normal, pues siempre predomina en mí la excentricidad mental y me planteo inquietudes un poco raras. Dicen que el tener un carácter pesimista y una actitud cambiante y un poco bipolar no ayuda, pero de cierta manera me gusta. En el mundo tiene que haber de todo y yo sólo soy una pieza más, que aunque cueste encajarla en el puzzle, al final entra.
Puede que os gusten mis ideas o puede que no, a mí me da igual. Pero una cosa si tengo clara, seguiré disfrutando de esta experiencia hasta el último momento y sin arrepentimientos.
Canción: Sunn
Artista: Swirlies
Disco: They Spent Their Wild Youthful Days In The Glittering World Of The Salons
¿Cómo crear un disco emblemático sin haber creado ninguna de las piezas que contiene? Muy fácil sampleando. Eso debió pensar DJ Shadow al explotar el, a veces infravalorado, arte del corta y pega. Pero el fue mucho más allá, demoliendo y reconstruyendo estructuras que cimentaron un disco que ha día de hoy supuso una nueva era en la música contemporánea. Ese disco disco no es otro que Endtroducing...
De carácter conceptual y producción casera, el disco es una fantasía entre una colección miles de vinilos del sótano de una tienda de discos. Es una obra maestra del sampling y una especie de banda sonora oscura, intrigante, profunda, trepidante e intimista, en la que un crisol de muestras de jazz, soul, rock, psicodelia, electrónica, funk, breaks, diálogos de cine, voces, etc se funden y cristalizan sin fisuras, todo ello junto a los impecables scratches con que Dj Shadow adereza magistralmente los cortes del disco.
Como dato curioso tiene el record guiness de el primer disco creado sólo y exclusivamente a partir de samples y denotan la calidad de su creador, capaz de transformar miles de fragmentos en algo nuevo y único.
En definitiva, un disco genuino dentro de la cultura underground imprescindible no solo para los amantes del hip-hop o la electrónica, sino para aquel que sienta la necesidad de explorar nuevos horizontes musicales.
Os dejo con un tema perteneciente al disco. ¡Disfrutadlo!
No, esto no es política. Es mucho más que esas chorradas que nos obligan a ver y que nos rodean continuamente, intentando que busquemos un estado en el cuál seamos más sociables y sociales con nuestro entorno. Eso está muy bien, pero, ¿de verdad hay que buscar esa grandeza o ese poder para sentirte mejor? Deja ese egocentrismo y busca en tu interior. No todo es material y aunque la mayoría de los valores estén comprados e infravalorados, eres mucho más de lo que tienes. Eres lo que te ofreces a ti mismo y a los demás, eres sentimientos y emociones, eres uno y eres todos. Todo tiene un equilibrio, sólo hay que saber medir las cantidades. No seamos fantasmas de nuestro estado en un mundo en transición y entrópico que nos venden como correcto y equilibrado.
¿Por qué? ¿Por que tengo que asentir como un tonto creyendo que es lo correcto? ¿Qué o quién decide lo que es correcto o no para mí? Déjame tropezar y equivocarme. Déjame seguir y ver las posibilidades que me ofrece. ¿Y qué si no quiero ser como tu quieres que sea? ¿Y qué si no es lo mejor para mí pero es lo que yo quiero? Deja ya de frustrarte por el qué dirán. Sólo yo puedo decidir que soy o donde voy. No me importan las críticas y muchos menos los elogios. Sólo quiero intentarlo al menos una vez y descubrir si es verdad eso que dicen. Quizás lo sea y pueda ser por una vez libre. Quizás encuentre mi camino.
Que recuerdos esos viajes de pequeño a sitios que siempre recordarás y a los que nunca volverás, tal vez por que la vida no da tanta oportunidades para ello o bien por dejar esa nostalgia en tu mente, manteniendo ese grato recuerdo de infancia inalterable y fresco que siempre te acompañará.
Mis padres siempre preocupados, preguntaban que porque era tan callado en los viajes y supongo que con el tiempo entendieron mi forma de disfrutar de ellos.
Las ventanas eran mi canal de televisión favorito durante los trayectos. Las miles de imágenes, paisajes, estampas, puestas de sol y nuevos horizontes que descubrí en esos viajes quedarán grabadas a fuego y compondrán un álbum de fotos que jamás podré explicar ni enseñar. Muchas ideas surgieron de mi cabeza durante esos pequeños o grandes espacios de tiempo, para mucha gente muertos, pero que yo supe aprovechar al máximo. Muchos momentos de meditación pasé entre aquellos asientos escuchando música y relajándome con las vistas a veces rudas, pero de gran belleza. Muchas manos fuera de la ventanilla fruto de la excitación de que el viaje iba a concluir esperando que algún día volviera a sentir ese momento único e irrepetible.
Soy un perdedor. No puedo dejar de vivir en el pasado. Cada vez que la escucho, los ecos de aquellos tiempos resuenan en mi cabeza. La primera vez que entré en aquel rústico lugar, más parecido a una casa-cueva y gobernado por una serie de seres desconocidos hasta ese momento, fue como si hubiera encontrado una parte del cielo en mitad de las vastas callejuelas del pueblo. No estaba sólo, me acompañaba uno de mis mejores amigos y ambos asentimos la cabeza sabiendo que habíamos descubierto una parte de nosotros y un sitio al que alguna vez llamemos hogar. Cada vez que entraba, la cultura underground que retozaba por las paredes me rebozaba por completo, las bebidas que rodaban por el ambiente y por mi cuerpo, haciendo que todo el proceso fuera más fluido y despertara del letargo semanal dispuesto a compartir ideas con aquellas personas, al principio desconocidas que poco a poco se fueron convirtiendo casi en una familia. Fue una época agradable en mi existencia. Muchas noches y muchos inviernos pasé entre aquellas cuatro paredes y junto a aquella banda sonora inconfundible, pero por desgracia, aquél espíritu que rezumaba por la puerta de entrada se fue y no sé si algún día volverá. La fauna autóctona desapareció y los poco que quedan como yo, rememoran una y otra vez aquellos tiempos, en los que había un sitio donde refugiarse sin prejuicios y que conservaremos en nuestra memoria intacto y eterno.
No lo puedes ver pero está hay, contigo, observandote y esperando a que cometas el mínimo error para clavarte un cuchillo en la espalda. Acto seguido, te preguntará si te ha dolido mucho, que lo ha hecho sin mala intención, que es intrínseco a él. Lo llaman karma dicen. Yo lo llamo humanidad.
Dejémonos de tonterías, hemos venido a putearnos los unos a los otros sin pensar en las consecuencias, sino que explicación tiene que realizando buenas acciones como predican, sean al que más puteen. Son pruebas que da la vida, tienes que ser fuerte para soportarlas y estar expectante, para arremeter y contratacar. No serás más feliz por ello, pero al menos te sentirás útil y capaz de seguir adelante. Riete tú de la vida amigo, ya llegará tu hora y entonces no tendrá sentido todo lo que hayas hecho hasta ahora, simplemente estará tu karma señalándote y llenándote de prejuicios.
Quién diría que después de las hostias que le metieron a la hija de papá Coppola por sus múltiples escarfeos en la industria del cine, acabaría siendo oscuro objeto de deseo cinéfilo para almas errantes como la mía. Deliciosamente amarga, la película que os recomiendo a continuación forma parte de ese círculo y se titula:
Ópera prima de Soffia Coppola, y basada en la novela homónima de Jeffrey Eugenides, el film nos narra la historia de 5 jóvenes hermanas de una típica familia acomodada estadounidense de los años 70. La película, estrenada en 1999, en sí es un relato oscuro, misterioso y trágico sobre la vida de sus protagonistas, pero a la vez es un viaje audiovisual hermoso, atemporal y muy filosófico. A esto hay que añadir que la ambientación setentera que plasma Coppola en todo el film, actuaciones más que correctas de sus actores, en especial de Kirsten Dunst, y una muy buena banda sonora, a cargo del grupo de música electrónica Air, hacen que el conjunto de la pieza sea un deleite para su visionado. Criticada a partes iguales, no deja de ser una pieza esencial del cine independiente americano y muy buen inicio de una directora que a día de hoy da que hablar.
Os dejo un trailer de la película y que aproveche.
Los años pasan volando y solo me doy cuenta cuando empiezo a contarme las arrugas de las manos. Aún recuerdo cuando morí por primera vez. Era una noche veraniega, apunto de dar un gran paso en la vida, pero todo se truncó de repente. Me despedí de ella con un beso sabiendo que seguramente no la volvería a ver más en mi vida. De repente se alejó unos pasos, yo alzé la mirada y allí estaba ella, con su sonrisa, apuntándome con la pistola. Entonces lo comprendí todo y recé porque todo pasara rápido. Y entonces me mató.
Más o menos durante un año estuve divagando entre vivos como un zombie, preguntándome una y otra vez si había hecho lo correcto, reviviendo los momentos junto a ella cuando estaba vivo. Hasta que lo comprendí: no era ella la que sostenía la pistola. ¡Era yo! No podía aceptar la realidad y me pegué un tiro en la cabeza. Fue en ese momento, cuando me prometí que nunca volvería a cometer el mismo error. Así que cogí mi viejo cuerpo oxidado, me lo puse y, de entre los escombros de mi vida, renací, por primera vez.
